Espectáculos.- El rapero estadounidense Daniel Hernández, mejor conocido como Tekashi o Sixnine, enfrenta serias acusaciones de violencia, barbarie, tortura, asociación de malhechores e intento de homicidio contra los productores Nelson Alfonso Hilario García, Cristian Rojas Solís y Chamil Lázaro Capellán (Diamond la Mafia), tras propinarle un cachazo y una golpiza a los dos primeros el viernes 13 de octubre en La Vega.
Y todo por unos celos y un lío de faldas… Así se establece en la solicitud de medida de coerción depositada ante la Oficina de Atención Permanente de La Vega, donde el Ministerio Público consigna que Tekashi no actuó solo, ya que estuvo acompañado de tres cómplices no identificados y prófugos todavía, a casi una semana de ocurridos los hechos.
En el documento se describe lo sucedido:
Pasada la medianoche del viernes 13, el celoso Tekashi y sus tres compinches buscando a la famosa Yailin penetraron en actitud desafiante al estudio de grabación donde estaban Nelson y Cristian, en el segundo nivel de la Plaza Magalys, en La Vega. Una vez adentro, le dieron una trompada y un cachazo de pistola a Nelson, agarrándolo entre dos y dándole una tunda, mientras que a Cristian también le dieron una zurra. Los dos salieron fuertemente heridos, con traumas faciales y en otras partes de sus cuerpos. Todas las lesiones figuran en certificados médicos legales.
Mientras hacían estos arranques de violencia, tratando de calmar sus furiosos celos, el colérico Tekashi sacó su celular y le hizo una videollamada a Diamond la Mafia, que era realmente al que ellos andaban buscando para «sonarlo» esa noche, decididos como estaban a matarlo según la acusación.
De hecho, en la videollamada le mostró a Diamond la Mafia a sus socios golpeados, diciéndole: «Mira lo que le hice a tu gente«. Cuando ya se iban, Tekashi les dijo a los agredidos que si volvía los mataría, y hasta les preguntó a sus cómplices que si los aniquilaba ahí mismo para salir de ellos. Por fortuna, no sucedió lo peor.
Como se trató de unos celos desenfrenados, el Ministerio Público sospecha de posible agresión doméstica contra Yailin, la cónyuge de Tekashi. Sin embargo, unos días después de ocurrir lo que ocurrió, Yailin dijo que él no ha llegado a maltratarla ni agredirla.
«Más importante aún, el imputado Tekashi es quien ejerce dirección de la banda, dirección que se comprueba por el solo hecho de que los sujetos no identificados aún son guardaespaldas del mismo, y es quien lo lleva hasta este lugar con el designio de empelar la tortura y las violencias ejercidas para intimidar», se lee en la medida de coerción.
Consumados los hechos, que estuvieron a punto de generar una tragedia, el cabecilla de las agresiones se escondió en un hotel en Sánchez, Samaná. Fue detenido para ser presentado a la justicia. Basándose en su condición de extranjero, sometió un recurso de hábeas corpus tratando de evitar la prisión, pero ese recurso le fue rechazado.
Se espera que en las próximas horas se le conozca medidas de coerción, imputado por agresión, amenaza de muerte e intento de homicidio contra tres hombres.
Mientras tanto, de él solo se tiene la certeza de su nombre artístico, «puesto que no ha aportado voluntariamente documentos que permitan su correcta individualización e identificación».