Internacional.- Los 17 trabajadores que permanecían retenidos en una cárcel de Ecuador fueron liberados, informó el gobierno, que declaró en emergencia al sistema penitenciario debido a una nueva masacre carcelaria que dejó varios cuerpos desmembrados. «Todos los servidores penitenciarios que fueron retenidos en los centros de privación de libertad ya fueron liberados», señaló la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia (Segcom) en un comunicado.

Agregó que «el último grupo de agentes salió, en Esmeraldas«, una provincia en el noroeste del país. En esa prisión hubo un amotinamiento la víspera, según las autoridades, como represalia a la declaración del estado de excepción. El amotinamiento en Esmeraldas fue un espejo de lo ocurrido en la penitenciaría de Guayaquil, ubicada en el suroeste de Ecuador, donde durante cuatro días hubo enfrentamientos entre reclusos que dejaron un número todavía indefinido de muertos.

La Fiscalía, encargada de recuperar los restos, en principio informó de 31 fallecidos. Sin embargo, la policía señaló que halló 11 cadáveres 29 «piezas anatómicas». Desde febrero de 2021, más de 420 reclusos han sido asesinados en medio de violentos choques que dejan escenas de cuerpos decapitados e incinerados.

El martes también se desataron focos de violencia en la capital de Esmeraldas, que lleva el mismo nombre. Alertas de bomba en gasolineras y un artefacto explosivo desactivado en una sede de la Fiscalía llevaron al gobierno local a suspender la jornada laboral y escolar en esa ciudad de 220 mil habitantes.

Esta mañana reportes de medios locales mostraban calles vacías y locales comerciales cerrados. Tras la masacre en la penitenciaría de Guayaquil, también llamada Guayas 1, más de un centenar de guías penitenciarios fueron retenidos en cinco prisiones del país. Hasta ayer que 120 de 137 fueron sido liberados. El gobierno precisó que este miércoles «no se han reportado nuevas retenciones«. «Se mantienen acciones conjuntas para precautelar en orden de los centros de privación de libertad y devolverle la paz a los ecuatorianos«, agregó.

Los reclusos de 13 centros carcelarios que el domingo se declararon en huelga de hambre pusieron fin a la medida el martes. Un reciente censo estableció que en las 36 cárceles ecuatorianas, con capacidad para unas 30 mil 000 personas, hay una población de 31 mil 321 presos. La mayoría están por narcotráfico. El comité de pacificación creado por el gobierno del presidente Guillermo Lasso tildó el año pasado a las cárceles ecuatorianas de «bodegas de seres humanos y centros de tortura«.